jueves, 19 de julio de 2012

LA ECONOMÍA ESPAÑOLA: UN BOLERO DE RAVEL ANGUSTIOSO

España parece instalada en un bolero de Ravel económico, en los últimos cinco años sólo escuchamos la misma canción: recesión económica que provoca la caída de ingresos del Estado, que genera un déficit público inasumible y que el Gobierno intenta solucionar con un recorte de gastos que a su vez impiden la recuperación. Esto, a su vez, genera más desempleo y recesión, impidiendo un aumento de los ingresos del Estado. Esta realidad económica mantiene elevado nuestro déficit público, cual espada de Damocles que es sostenida sobre nuestras cabezas por los mercados financieros… Lo más sorprendente de todo es que el responsable de la partitura, el Gobierno, no ha modificado una sola nota en los últimos años. Llevamos cinco años con un modelo económico y de Estado que no funciona y que se empeñan en que no tenga alternativa.

Creo que ni el Gobierno, ni Europa, ni los mercados, ni siquiera los ciudadanos son conscientes de lo irresponsables y equivocadas que han sido las medidas que ha tomado el PP en los últimos seis meses. En mayo de 2010 José Luis Rodríguez Zapatero contribuyó a que los famosos “brotes verdes” amarilleasen rápidamente y España se convirtiera en el único gran país de Europa que no conocía los beneficios de la recuperación económica. La medida que tomó fue un recorte de 10.000 millones de euros que nos ha mantenido convalecientes durante dos años. ¿Se imaginan hacia donde llevará la economía un recorte de 10.000 + 30.000 + 65.000 millones de euros? Esos 95.000 millones de euros no son un dinero que se redistribuya dentro de la economía, que pierda el sector público y sea recuperado por el privado. Es un dinero que desaparece de nuestra economía, que se sitúa en las manos de los mercados financieros vía tipos de interés o pago de la deuda. Es un dinero con el que los españoles dejarán de consumir, lo que destruirá cientos de miles de puestos de trabajo y miles de empresas y, por lo tanto, hará que el Estado vuelva a incumplir sus objetivos de ingresos. Sólo un ejemplo, el recorte de 5.500 millones de euros a los funcionarios en su paga extra, no es como plantea el Gobierno un recorte en términos absolutos, no se reducen automáticamente los 5.500 millones de euros. De esos 5.500 millones aproximadamente un 18% son retenciones de IRPF (990 millones de euros), un 14% son ingresos en IVA (770 millones de euros), un 12% son ingresos de la Seguridad Social (660 millones de euros) y dos terceras partes del resto se destina al consumo, es decir, a la generación de ingresos y empleo en el sector privado. Se estima que los españoles ahorramos el 9% de nuestros ingresos, por lo tanto, el ahorro final Estado se reduce a unos 500 millones de euros, dinero que tendríamos en cuentas de ahorro bancarias y que ahora es el Estado el que directamente sitúa en los bancos.

Esto quiere decir, y lo veremos en las siguientes previsiones económicas del Gobierno, que el déficit público seguirá alto, así como el acoso de los mercados sobre nuestra prima de riesgo. Entonces, ¿seguirá el Gobierno podando hasta que el árbol de nuestra economía se muera del todo? El objetivo de un Gobierno nunca puede ser la reducción del déficit público; éste, como cualquier otro indicador económico, no es un fin en sí mismo, sólo indica que los ingresos no llegan. Este es el verdadero problema del Gobierno y la sociedad española, necesitamos un modelo económico alternativo a la construcción, que regenere los ingresos que se perdieron con el estallido de su burbuja. El problema es que los ayuntamientos no se podrán volver a financiar con la recalificación de suelo, que el Estado no volverá a recibir los ingresos de la venta de un millón de viviendas y el trabajo de 2,5 millones de obreros de la construcción. En el 2007 algunos economistas decían que un nuevo modelo económico es una apuesta a medio plazo, que lo inmediato era el déficit, estabilizar la deuda y ganar credibilidad frente a los mercados… Ya hemos perdido cinco años y nunca recuperaremos la credibilidad si no encontramos la senda del crecimiento, porque ¿alguna vez alguien recuperó el dinero de una inversión cuyos resultados de ingresos y beneficios se reducían año a año?



6 comentarios:

  1. Tienes razón, como siempre. Yo llevo tiempo diciendo que el déficit público es como la fiebre cuando estás enfermo, un síntoma que hay q controlar, pero contra lo que hay que luchar es contra la enfermedad que provoca esa fiebre, que como muy bien dices es la falta de puestos de trabajo y por ende, el bajo consumo.
    El problema viene en el caso de España del modelo productivo que tenemos instaurado desde los años 50/60. Turismo de baja, muy baja, calidad.... y la construccion. cambiar el modelo productivo de un país no es algo que se pueda hacer en unos meses, necesita tiempo... e inversión, mucha inversión. Tambien necesita tener claro hacia donde se debe apostar, y lamentablemente ni este gobierno ni los anteriores lo sabian. Yo creo que ni tan siquiera se lo han planteado.
    Con un modelo agotado, y sin NADA a la vista, como muy bien dice un amigo mio: "tiempos aciagos nos esperan"

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  2. Desde luego que el consumo va a caer en picado, ya se está viendo ahora mismo. Pero nos tendríamos que hacer la siguiente pregunta por qué no hay propuestas alternativas? A quien interesa que no salgamos a flote? Como puede ser tan ineficaz un gobierno para no darse cuenta que todo lo que está queriendo sacar adelante no sirve más que para crear desconcierto, impotencia y pobreza...
    Seguiremos manifestándonos, no nos podemos quedar con los brazos cruzados, no les sigamos el juego.

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  3. Y digo yo..... no hay manera de parar esto? Hasta qué punto pueden seguir hundiendo el país haciendo oídos sordos a las contínuas protestas, manifestaciones eindignación general? Está el país que arde y tenemos que seguir aguantando a la gente que supuestamente seguía un modelo democrático? No es castigable el incumplir promesas electorales y mentir siteméticamente? Es todo lo que hacen legal? Por ejemplo en Portugal se ha declarado anticonstitucional quitar las pagas extras.
    Sólo nos queda dar mucha guerra, ser molestos, hasta que no puedan más.

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  4. Ahora empiezo a entender a los países latinoamericanos de los ochenta... cuando se sentían completamente succionados por los vampiros del sistema, con el agravante de unos supuestos socios europeos que se cruzan de brazos y deliberan años antes de solucionar cualquier problema. Malditos ents!!! fuck them all...

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  5. Para entender esto es imprescindible ver el documental "la doctrina del shock" de Naomi Klein.

    Lo que hicieron en latinoamérica en los 70-80...es lo mismo q están haciendo en Europa en el 2011-2012

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  6. Gracias a todos por vuestros atinados comentarios. Sólo decirte Feli que yo creo que te pasé ese documental durante el curso, la verdad que no me acuerdo muy bien. Y que esas políticas en Latinoamérica se denominaron el Consenso Washington, que supusieron una "década perdida" para el continente y que, desde entonces, no hay un partido de derechas, excepto en Colombia, que haya ganado las elecciones en el continente. En Latinoamérica se crece porque el neoliberalismo está totalmente desacreditado, algo que pasará en este país después de la catastrófica legislatura de Rajoy.

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